Siempre hemos sabido, desde niños, que en la Tierra hay vida gracias a que el Sol nos da luz y calor. Lo que entonces no teníamos tan claro era que las estrellas que veíamos como puntitos durante la noche son soles que están a una enorme distancia (en otro tiempo condenaron a muerte en la hoguera a algún astrónomo por decir esto). La pregunta casi inmediata es: "¿cuánto se parecen esos soles al nuestro?"
La secuencia animada reproduce la destrucción e incorporación de la galaxia enana Sagitario a la Vía Láctea. Restos de Sagitario, galaxia satélite de la nuestra, fueron descubiertos por investigadores del IAC y de la Universidad de Ginebra.
La ciencia es amena, pero no sencilla; cotidiana, pero no banal. Ahondar en sus entresijos requiere un esfuerzo con premio. Leer ciencia es una actividad reducto de pocos y, además, con algo de connotación masoquista y mucho de inquietud profesional.
En 1799, tropas francesas encontraron cerca de la ciudad de Rosetta, en la desembocadura del río Nilo, una estela incompleta de basalto negro que recibió el nombre del lugar -Piedra Rosetta- y que presentaba tres series de inscripciones: la primera, de 14 líneas, era jeroglífica; la segunda, de 22, demótica; y la tercera, de 54, griega.
En esta época de economía global, en la que diariamente las empresas despiden trabajadores, aparece en el horizonte un nuevo riesgo de desempleo: cada vez hay menos OVNIs. La falta de avistamientos de objetos voladores no identificados dejará sin trabajo a muchos entusiastas del tema.
La relatividad formulada por Einstein es conocida de nombre por muchos pero entendida por muy pocos. Estos, además, son tan precisos en sus manifestaciones que para un profano el asunto se vuelve incluso más complejo de lo supuesto al principio, que no es poco.